miércoles, 19 de febrero de 2014

Rivalidades entre fans

Con motivo del concierto de los BackStreet Boys (BSB) que dieron anoche, me ha dado por pensar en esos odios infundados no entre bandas, eso es otro tema, sino entre las fans de los grupos. Cualquiera que me conozca sabe la tirria que les tengo desde que salieron a la luz, es decir, tras separarse Take That (TT). No me caen bien, algunos de los miembros peor que otros, pero ¿por qué? Yo qué sé. Hace ya tanto tiempo...

Pienso que quizá parte de la culpa de este odio venga por la prensa, siempre comparando, y más cuando coincide en el tiempo el fin de una banda y el resurgir de una nueva. Más si una es de Reino Unido y otra de EE.UU. Si a una adolescente se te ocurre decirle, aún con el dolor de la separación reciente, que los que acaban de llegar son los nuevos [inserte banda disuelta aquí], no esperes que la reacción sea pacífica. Cierto es que algunas se convirtieron fans de los nuevos sin dejar de serlo de los viejos. Olé por ellas, yo no pude.

Pero lo intenté, juro que lo intenté. Y aquí seguramente radica la verdadera causa de tanta manía hacia los BSB: me "quitaron" a mis amigas. La etapa adolescente es bastante dura ya de por sí sola, más si vas viendo que a tus amigas ya no les gusta la misma música, que desemboca en no poder compartir tu pasión. Para más inri, van y pasan a ser fans de la otra banda. La empiezas a escuchar, a conocerla, pero no te termina de convencer, con lo cual terminas siendo una marginada que "no está a la onda". Y como tus amigas son como son, no se callan una y no piensan antes de hablar (¿qué adolescente lo hace?), empiezan las púas, las críticas e insultos sobre los que hacía un año habían sido sus ídolos. Yo tampoco me callaba, y así empezamos un toma y daca de insultos sobre ellos, y al tiempo, la gota que colmó el vaso y rompió nuestra amistad. Drama total volumen I, con portazo incluido.

Cualquiera puede pensar que eso no eran amigas, que las amigas se respetan, pero para mí sí lo fueron porque a pesar de todo ese odio hacia TT, a pesar de lo mucho que les insultaron, a pesar de que nunca olvidaré que desearon la muerte de Robbie Williams por sobredosis, siempre recordaré pequeños detalles, algo tontos, que tuvieron conmigo: varios regalos sobre el grupo, algún recorte de una revista, e incluso un robo en unos grandes almacenes para conseguirme un póster, una de las mejores anécdotas de aquella etapa. Además, cosas de la vida, tras aquello volvimos a hacer las paces y tan amigas hasta que perdimos el contacto al coger distintos caminos.

Ya han pasado muchos años de aquello, pero la espinita sigue ahí. A ellas no les guardo rencor alguno, pero no olvido. En cuanto al odio sobre BSB, es como algo latente, está ahí dentro, escondido, pero surge en cuanto leo alguna entrevista y no estoy nada de acuerdo con lo que dicen. Y vuelve a salir esa adolescente al grito de "Mentirosos! Falsos! Qué falsos sois!". Pero luego pienso en la gente que conozco, personas encantadoras que han resultado ser fans de BSB, y veo lo emocionadas que están cuando se acerca la fecha del concierto, el nerviosismo de preparar todo para ese día, el orgullo que da ver que hablan de ellos en los medios, el subidón de adrenalina cuando tocan su canción favorita, la completa e inmensa felicidad cuando les conocen en persona... Y el odio se disipa, y me alegro que BSB existan porque hacen feliz a gente que me cae bien.

Porque es cuando me doy cuenta que, sin importar la banda, cuando una es fan, los sentimientos son idénticos, a todas nos hacen felices y nos ilusionan las mismas cosas, y es que, en el fondo, todas somos iguales.

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